martes, 22 de marzo de 2016

EL MUNDO DEPORTIVO: "RABIA POR PANTANI, TRISTEZA POR LA SINCRONIZADA". Por Cristina Cubero

Marco Pantani
"Il bandito e il campione" de Francesco de Gregori es una de esas canciones que me emocionan, siempre. Inspirada en la amistad de Sante Pollastri (un bandido) y Costante Girardengo (campeón de ciclismo), relata como la afición del bandido a seguir a su amigo acaba condenándole. Les confieso que llevo semanas enfadada con el mundo. Adoraba a 3 en una época que "el Pirata" no era el favorito de todo el mundo. Pero sí era el mío. Me fascinaba como subía las montañas y como se rebelaba al mundo con sus pendientes y tatuajes como el diablo, con esa forma tan especial de encarar la vida. No sabía que la camorra le había destrozado, que falsificaron el control antidopaje para que perdiera el Giro de 1999, que hicieron mucho más porque le colgaron el cartel de "tramposo" y acabó destrozado en la habitación de un hotel en Rimini. El delito de la camorra ha prescrito pero querría que la investigación llegara hasta el final. Quiero poder hablarle a mi hijo de Marco Pantani, al que animaba desde el televisor porque nadie escalaba como él.
Sigo enfadada con el mundo, lo reconozco, porque la actuación de la selección española de sincronizada en el pre-olímpico de Río de Janeiro confirmaba todo lo que veníamos advirtiendo hace meses. Sabían desde el Consejo Superior de Deportes y el COE que el combo era un auténtico desastre, no por nuestras nadadoras, sino por el staff técnico, que es un auténtico desaguisado. 
Lo sabían porque Thaïs Henriquez hacía meses que no nadaba con el equipo porque no soportaba la falta de profesionalidad de las entrenadoras.
Ana Montero, Esther Jaumá, Fernando Carpena y Gemma Mengual
El declive, el desastre absoluto de la no clasificación de España para los JJOO en un deporte que nos aseguraba medallas, es culpa de Fernando Carpena, presidente de la Federación de Natación, de los dirigentes que le han protegido y de las mentiras consentidas de alguna deportista con aires de estrella que ha logrado destrozar el deporte que tanto amaba (decía ella). 
Y no hablo de Gemma Mengual, que por lo menos ha tenido la dignidad, aunque haya sido en privado, de reconocer los errores. Claro que con Anna Tarrés, el combo estaría en los JJOO, claro que con Anna TarrésOna Carbonell se habría limitado a nadar con quien decidiera el staff técnico y seguro, segurísimo, ganaría medalla. 
No como ahora, que seguramente nos quedaremos en una cuarta o quinta plaza en dúo.
Lo siento, no puedo creer que España envíe al equipo junior al Europeo para evitar confirmar que en equipos estamos ya cuartos de Europa... ¡no del mundo!, me niego a pensar que el staff técnico tenga tanto miedo. 
En los últimos JJOO en Londres estuve con el equipo español en la piscina sólo dos horas antes de que compitiesen. Parecía imposible pero consiguieron medalla. Gracias a Anna Tarrés.

Ahora sólo espero que todas esas nadadoras que han vivido engañadas le reclamen a sus seleccionadoras y también a Fernando Carpena qué será ahora de ellas. Y qué pasará con su deporte. 
Marco Pantani…. adoraba a este ciclista. 
Tanto casi como a Anna Tarrés.

Fuente: Cristina Cubero (El Mundo deportivo) / CanariaSincro


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